¿Todavía no conoces los Lazos de San Guillermo?
Harina, mantequilla, huevo y azúcar son la materia prima base de los lazos de San Guillermo de León, un producto inalterado desde hace muchas décadas.
Fue en 1908 cuando Nemesio Montañés fundó la Confitería Montañés de Cistierna en León. Nemesio dio los primeros pasos para poner en marcha el negocio, a raíz de un traspaso que empezó a funcionar como fábrica de pan. Con el tiempo la especialización se orientó hacia el dulce mientras iban surgiendo nuevas ideas.
Nemesio decidió crear, allá por los años sesenta, un producto innovador y natural basado en un delicioso hojaldre con una forma característica y lo llamó Lazo de San Guillermo.
Una tradición de más de 100 años y cuatro generaciones de maestros pasteleros que se muestra muy orgullosa de mantener su compromiso en ofrecer productos naturales, elaborados de manera artesanal con los mejores ingredientes.
El nombre de Lazo de San Guillermo, se debe al patrón de Cistierna, que tiene la ermita en la falda de Peñacorada.
Los Lazos de San Guillermo han sido reconocidos por la Casa Real española y hasta por el expresidente del gobierno americano Jimmy Carter quien los probó durante su estancia en León en 1998.
Los ingredientes de los lazos provienen principalmente de los productos regionales de la montaña.
«La receta del Lazo de San Guillermo se ha mantenido invariable desde el tiempo de mi abuelo, ahí no ha habido ningún cambio».
Rafael Montañés Piedra (Cistierna, 1961)
En la actualidad Ana y David, nieta y bisnieto de Nemesio respectivamente, siguen la saga familiar, horneando pastas y hojaldres con el mismo espíritu de hace 100 años.
Los Lazos de San Guillermo son reconocidos por miles de clientes fieles en todo el país.